
Participaron en las carreras internacionales de Lille y Hoogstraten con resultados dentro de lo previsto.
Los hermanos Gómez cerraron la temporada corriendo en Bélgica.
Fotos: LUC VAN DER MEIREN y LYDIA VAN DE MEERSSCHE.
Iñigo Gómez y Jon Gómez pusieron punto y final a la temporada ciclocrossista este pasado fin de semana por tierras centroeuropeas. Los hermanos del Bioracer- Caravanas Erandio tomaron parte el sábado en la manga final del Bpost Bank Trofee, que se celebró en Lille, mientras que al día siguiente participaron en la penúltima prueba puntuable para el Superprestigio, en la localidad de Hoogstraten.
Los resultados de ambos en sendas carreras estuvieron dentro de lo previsto, pero también con ganas de descansar tras una temporada con altibajos y con un Campeonato de España donde los dos rindieron a gran nivel. Volviendo al periplo belga, señalar que en Lille asistimos a la victoria del reciente campeón del mundo, el holandés Mathieu Van der Poel, que se impuso con claridad a Wout Van Aert y al veterano Sven Nys. Iñigo Gómez terminó 43º y no pudo eludir la norma del 80%: “Fue una carrera muy rápida, en la que en ningún momento me encontré a gusto y sufriendo bastante. Eso sí, disfruté mucho del circuito”.
Por su parte, Jon Gómez puntualiza que “no pude competir en la última Copa del Mundo de Hoogerheide porque anduve fastidiado de las costillas. Pero tenía ganas de correr así que fui a Lille y disfruté mucho. Eso sí, iba muy justo y me retiraron cuando Van der Poel iniciaba la última vuelta”. La carrera de Lille ha sido, curiosamente, la primera salida internacional de esta temporada para Jon.
Más de lo mismo en Hoogstraten.
En el Superprestigio de Hoogstraten del domingo, se volvió a vivir una nueva exhibición del hijo del mítico Adrie Van der Poel, con una carrera inmaculada de principio a fin y haciendo honor al arco iris logrado apenas una semana antes en Tabor. El holandés se impuso en solitario y con claridad a Kevin Pauwels y a Wout Van Aert. Los dos chicos del Bioracer-Caravanas Erandio tuvieron suerte dispar. Iñigo pudo terminar la prueba, clasificándose en el puesto 35º, detrás del vigente campeón de España, Aitor Hernández: “Sufrí una caída de salida que me dejó el último, pero pronto empecé a encontrarme bien, logrando pasar a gente que iba por delante. Vuelta a vuelta fui recortando tiempo a Aitor, que es quien tenía inmediatamente por delante. Pero me quedé a diez segundos de él antes de que nos echaran por la norma del 80%”.Peor le fue a Jon, que no pudo poner un brillante punto y final a una temporada algo aciaga para el bizkaino: “No pude ni acabar la primera vuelta. Salí bien, esquivando las dos montoneras que hubo de salida, pero luego sufrí una fuerte caída en la que rompí la bici y me llevé un fuerte golpe en una pierna, no pudiendo finalmente continuar”.
Con estas dos carreras, los hermanos Gómez ponen punto y final a la temporada invernal de ciclocross, tras haberlo hecho el resto del equipo Bioracer hace varios días, después los nacionales de Gijón y los mundiales de Tabor.