
Supera tus miedos en la bicicleta.
<![CDATA[
LOS MIEDOS EN LA BICICLETA: CLAVES PARA SUPERARLOS.
Introducción: Dori Ruano, exciclista profesional (http://www.doriruano.es)
Texto: Vanesa Fuentes, Licenciada en psicología y “practicante entusiasta de este deporte”.
Fotos: Web Dori Ruano, Vanesa Fuentes, Meme y Pablo Ferao.
Presentación de Meme.
¿Por qué hay tan pocas féminas en este deporte? Esta es una de las preguntas que constantemente me ronda en la cabeza. Quizás haya diversos motivos, pero uno de los que más fuerza tiene para mi es el “miedo”. Cuando he animado a alguna chica a participar en pruebas como las Doce24, alguna de las contestaciones ha sido es “que rodar sola…”, “si me pasa algo…”, etc.
Tenía ganas de afrontar este tema, y encontré la ocasión ideal al conocer a Vanesa, aficionada a este deporte y psicóloga de profesión. Me gusta que las propias chicas seáis las que nos habléis de esos problemas que nos preocupan, como ocurrió con el artículo de los problemas ginecológicos que también nos escribió otra aficionada, medico de profesión.
Para introducir este tema, he tenido el honor de que Dori Ruano, una de las mejores ciclistas profesionales de nuestra historia, me escribiera unas palabras. Como ella nos cuenta, los miedos son barreras que podemos destruir. Comienza a destruir las tuyas, y descubrirás ante ti un mundo nuevo de sensaciones y experiencias. ¡Gracias Dori!
Introducción:
Por Dori Ruano; Ex ciclista profesinal, Ciclo-turista en la actualidad.
Dori Ruano en competición.
Los miedos son las barreras psicológicas que cada uno de nosotros nos ponemos por falta de confianza, ya sea en la condición física, ya sea en las destrezas, habilidades y manejo de la bicicleta.
La actitud y la determinación de enfrentarse a ellos, será fundamental para superarlos.
Una actitud positiva y una actitud de “puedo hacerlo” nos ayudarán a la hora de poder realizar una ruta en bicicleta de larga duración (siempre y cuando nos hayamos preparado físicamente). Los pensamientos negativos siempre nos limitarán y en momentos de bajón físico, pesarán mucho en nuestra cabeza.
Durante mi carrera profesional como ciclista he entrenado con muchos hombres con los mismos miedos de cualquier mujer que monta en bicicleta. El poder comprobar que el miedo es inherente a la condición de género me ayudó a afrontar “mis miedos”, que casi siempre venían condicionados por la inseguridad en el nivel físico (el miedo a no poder seguir el ritmo de los hombres).
A medida que mi nivel físico iba aumentando con el entrenamiento, dichos miedos fueron quedando en el olvido y la actitud positiva con la que siempre lo afrontaba: “si ellos pueden hacerlo, yo también puedo”.
Otro factor que puede influir en el ciclista o la ciclista es el entorno que nos rodea, que en muchos casos no lo hace con refuerzos positivos y en otros muchos casos es de menosprecio y palabras negativas que aumentan aún más los miedos.
El entrenamiento físico, el entrenamiento de las habilidades de destrezas y manejo de la bicicleta y el entorno ideal de optimismo, ayudarán a las chicas a vencer los miedos que puedan ir apareciendo a la hora de montar en bicicleta.
Claves para superar los miedos:
Por Vanesa Fuentes, Licenciada en psicología y “practicante entusiasta de este deporte”.
Vanesa Fuentes.
Cuando comencé a escribir este artículo pregunté a mis amigas bikers, qué cosas les daba miedo cuando montan en bici. Todas coincidían en muchos aspectos como m
ontar de noche, montar sola sin ningún acompañante, tener un problema mecánico, montar en ciudad…
Analizando cada una de ellas, he llegado a la conclusión de que en muchas ocasiones somos nosotras mismas las que nos ponemos barreras o excusas. Nos da miedo salir solas, nos da vergüenza porque creemos que es un deporte de chicos, nos da pereza hacer un esfuerzo extra para conseguir subir esa cuesta que tanto se nos resiste, no creemos en nosotras mismas para ser capaces de solventar esa posible avería que nos puede surgir en cualquier ruta, etc.
Y por si esto fuese poco nos encontramos además con una serie de mitos y creencias sobre el deporte femenino ampliamente extendidos, pero que son inexactos o erróneos. Creencias que tienen que ver con la debilidad física de las mujeres:
“Los cuerpos de las mujeres son inferiores a los de los hombres porque ellas están más determinadas por su naturaleza física (menstruación, embarazo, cuidado de los hijos, etc.)”. “Los cuerpos de las mujeres son más blandos, débiles y vulnerables a las lesiones que los de los hombres y por tanto necesitan ser protegidos”,”Las mujeres no deben hacer ejercicio cuando están embarazadas ni durante la menstruación”, “Las mujeres que participan y sobresalen en deportes que requieren contacto físico son masculinas o no son mujeres “de verdad”, “Las mujeres que participan en entrenamientos enérgicos se pondrán feas, abultarán sus músculos y perderán su feminidad”…
Es cierto que el mountain bike es un deporte muy duro y explosivo por lo que no es el que más se adapte a la fisiología femenina, pero realizando las adaptaciones necesarias puede resultar el deporte más placentero del mundo.
Pero, ¿por qué nos asaltan estos miedos y cómo podemos enfrentarnos a ellos?
Muchas veces, nuestros miedos, enfermedades o dolores físicos están conectados con nuestras emociones. Éstas, normalmente suelen ser emociones negativas no resueltas y se nos presentan en nuestra vida de forma que nos impiden realizar algunas actividades
Lo primero que tendremos que hacer es preguntarnos si estamos siendo realistas, si es tan malo como imaginamos, si estamos exagerando, si es cierto que no podremos hacer lo que queremos hacer. Debemos preguntarnos qué podemos hacer para afrontarlo, o a quién podemos pedir ayuda.
Una vez que decidimos enfrentarnos a nuestros miedos, podemos imaginarnos que hay algo o alguien que nos protegey nos da seguridad. Por ejemplo, podemos pensar en una persona conocida o imaginaria que está a nuestro lado y nos inspira confianza y calma. Utiliza tus palabras, ya que pueden ser una magnífica técnica para vencer el miedo. Las palabras le dan forma a tus pensamientos, te hacen valiente, te inspiran y edifican tu espíritu.
Yo propongo vencer los miedos convirtiéndolos en alertas y adoptando rutinas un poco más conservadoras, me explico:
Miedo a la noche:
Si tengo miedo a montar de noche, me dará mucha seguridad llevar una luz delantera potente que desvanecerá el miedo a desorientarme. Si visto ropa reflectante y llevo una luz trasera, mi sensación de estar desprotegido o indefenso ante el resto de vehículos, disminuirá considerablemente ya que me ayudará a hacerme visible ante ellos.
La pérdida del sentido de la vista provoca que se nos acentúe el oído, con lo que percibiremos sonidos que normalmente pasarían desapercibidos por el día. Además la absoluta oscuridad te envuelve en una agradable sensación de tranquilidad. No os perdáis estas sensaciones! Una ruta nocturna en verano es increíble.
Montar sola:
Si tengo miedo a montar sola, la solución sería buscar compañía pero esto no siempre es posible. En ocasiones no coincidimos con nuestras amistades, los horarios de los trabajos no nos permiten quedar con nadie, nuestras responsabilidades nos dejan poco tiempo…
En ocasiones montar sola viene de la mano de otros miedos como pueden ser miedo a un accidente sin posibilidad de que nos localicen o a una enfermedad repentina en medio de la nada. Por esto, nos dará mucha tranquilidad informar a un familiar o amigo de la ruta que vamos a seguir para que en caso de que no volvamos a la hora prevista, sepan en qué zona pueden ir a buscarnos.
Llevar un pequeño botiquín y el móvil con batería podría ayudarnos también a tomar la decisión de salir sola a rodar. Además también aconsejaría no improvisar demasiado durante la ruta, esto es, no realizar saltos en una zona que no conozcamos por miedo a accidentarnos, no investigar caminos nuevos si no estamos del todo seguros, llevar gps si disponemos de uno… Estos pequeños consejos nos ayudar]
]>