El madrileño acaba cuarto en la penúltima puntuable del torneo tras dos bajadas sobresalientes
Daniel Castellanos afronta su último periplo de las UCI World Series de DH en tierras americanas con una primera prestación sobresaliente. Snowshoe, en el estado norteamericano de West-Virginia, acogió este fin de semana la 7ª y penúltima cita puntuable de la Copa del Mundo, y de ella sale muy reforzado tras dos bajadas donde mostró su mejor versión.
Daniel midió su progresión sobre un trazado al que “tengo mucho cariño, ya que fue la primera en la que por primera vez en mi vida me clasifiqué para una final de Copa del Mundo en 2022”, recuerda-. Me gusta mucho, porque es bastante físico y los físicos se me dan bien. Tiene un poco de todo, con muchas piedras y zonas de agarrarse muy fuerte del manillar por un lado, como otras de pedaleo. En general, muy completo”.
Ya avisó en la sesión de calificación del jueves con un 6º puesto, a menos de 9” del intratable Ryan Pinkerton. “Hice una buena bajada y eso me hizo estar confiado para la final”, reconoce. Así que al día siguiente fue a por todas, encima, con las averías y las caídas sin atisbarse.
“A pesar de salir de los últimos y tener bastantes nervios, supe hacer en la final una de mis mejores bajadas de siempre –detalla-. Hice el mejor tiempo provisional y estuve en el hot seat hasta que llegó el último corredor participante, y me descabalgó del podio por apenas 7 centésimas”.
Un 4º puesto, su 2º mejor resultado en la Copa del Mundo que le dejan muy satisfecho: “Estoy super contento de cómo me fue todo el finde, ya que no tuve ningún problema mecánico ni en forma caída tanto en la calificación como en la final. Me voy con muchas ganas y motivación para la última puntuable de la Copa del Mundo en Canadá”, concluye.
A falta del último asalto en Mont Sainte-Anne la semana que viene, Daniel es 12º en la general provisional de la Copa del Mundo, y a solo 6 puntos del top ten, por lo que sus opciones están intactas y las peleará hasta el final.
Fotos Sven Martin